Rodeado de amigos, consciente de lo complicado que sería el conseguir el objetivo de permanecer en Primera División y con la camiseta bien puesta, el pasado sábado me reuni con 2 grandes amigos a mirar por televisión -a falta de viaje- el partido en el que al final de cuentas se definió el descenso de Necaxa.
Era yo el primero en decir desde hace un par de semanas que la suerte del equipo estaba echada, sin embargo esperaba que de alguna fotrma el equipo me callara la boca y consiguiera algo que hubiera tenido tintes de hazaña. Y es que para como estaba el equipo -futbolística y anímicamente- era irreal pensar que podríamos vencer en fila a Atlante, Pumas y Pachuca para poder mantenernos con vida.
Necaxa cayó luchando contra la apatía de su dueño, contra la estupidez de su directiva y contra la falta de carácter de algunos jugadores. Necaxa cayó luchando con lo que tenía; con un 'Conejo' que nos salvó de muchas en el año, con un Quattrocchi al que le deberíamos poner un monumento y que debiera ser ejemplo de entrega para muchos jugadores profesionales, con un 'Tilón' entregado, con un Ledesma inspirado, con un Rincón poniendole huevos y con un Bueno que asumió el reto de tomar al equipo que nadie quería tomar.
Barbosa, Padilla, Iñiguez, Mosqueda, Ibarra y los 2 porteros suplentes -Vázquez y Hernández- entrarían en mi lista de los que se salvan. A los demás no los quiero volver a ver en mi vida, los demás le faltaron al respeto de fea manera a mi equipo y a su historia, y con ello me fraltaron al respeto a mi mismo, situación por la cual yo no tengo que respetar a esa bola de jugadores sin huevos.
Necaxa descendió víctima de una directiva de papel que no se cansó de tomar decisiones equivocadas, víctima de unos jugadores que solo estaban ahí para cobrar, y víctima -también- de infinidad de 'errores' arbitrales que nos quitaron puntos que hoy nos tendrían en la pelea.
Necaxa se fue, y yo me voy con el a donde sea que juegue. Yo seguiré orgulloso de mis colores, orgulloso de mi equipo y queriendo igual a mi Necaxa, a ese Necaxa que ha estado conmigo desde niño, a ese Necaxa que me enamoró y que me ha regalado grandes momentos, que me ha regalado triunfos, campeonatos y un sin fin de amigos.
Volveremos!
Awante Neca!
Al ver el titulo de tu post en mi blog y ver el uniforme de ryas rojas crei que se trataba de un post sobre el Almería, que le esta pasando lo mismo.
ResponderBorrarte acompaño en tu dolor.
Ni hablar compilla =(
ResponderBorrarOtra vez.
@ Ricardo:
ResponderBorrarSi, el uniforme es muy similar, aunque me parece que la historia que tienen ambos equipos es muy diferente.
Muchas gracias :)
Saludos!
@ Rofagolu
Ni hablar compadre :(
Le tenemos que dar las "gracias" al imbecil del presidente.
Saludos!