La semana pasada comenté en un post sobre una llamada telefónica que tuve con un ícono del equipo de futbol al cual soy aficionado, es decir, el Necaxa. Ese ícono es nada menos que el capitán del equipo y al que muchos llamamos 'El último ídolo necaxista', aquel jugador que por compromiso para con el club y por amor a la camiseta -algo extraño en estos tiempos- aguantó dos descensos y decidió quedarse con el equipo pese a tener ofertas de Primera División, me refiero a Pablo Quattrocchi, quien quizá sea el único jugador que ha sufrido y gozado como los aficionados hemos hecho en los ultimos años..
Aquella llamada del pasado martes duró alrededor de 10 minutos y fue para que nos pusieramos de acuerdo para una entrevista que un amigo mutuo había concretado un par de días antes, situación que nos dió un poco de tiempo para poder platicar sobre algo más que aquella cita que se pactó para el domingo. Hoy aún no puedo creer que tan sencillo es Pablo y las atenciones que tuvo desde esa llamada en donde me agradeció por las líneas que le he dedicado en aquel blog de Necaxa que yo he querido dejar morir en no pocas ocasiones. La entrevista se realizó este domingo en la ciudad de Aguascalientes en casa del jugador argentino.
El viaje en compañía de uno de mis mejores amigos -Alex- comenzó muy temprano el domingo y fue bastante tranquilo, contrario a lo que suponía le dedicamos poco tiempo a planear la manera en la que llevaríamos la plática con Pablo porque coincidíamos en varios de los puntos claves de ésta. Llegamos a Aguascalientes 5 horas y media después de haber comenzado el viaje y ahí la sensación de tranquilidad que teníamos comenzó a mezclarse con nerviosismo y ansiedad.
Tal como se planeó pasaron a recogernos las dos colaboradoras del blog quienes radican en aquella ciudad -Claudia y Mónica- para de ahí ir a comer y en teoría planear bien a bien que haría cada quien. No lo hicimos, solo disfrutamos la tarde hasta que era hora de partir a casa del que sería nuestro anfitrión. Estando a unos 10 minutos del lugar subimos al coche y con los nervios cada vez más presentes en el interior avanzamos rumbo a la cita. Al llegar tuvimos que identificarnos y esperar a que llamaran a Pablo para que él autorizara o no nuestro acceso al lugar. La respuesta fue si y a bordo del coche el nervio cambió un momento por júbilo. Nos estacionamos -mal, aunque corregimos de inmediato- y cuando estábamos bajando nuestras cosas apareció en la puerta Pablo Quattrocchi.
Se acercó a nosotros, nos saludó, nos agradeció que estuviéramos ahí y nos invitó a pasar. Era un tanto extraño, estábamos con alguien con quien en lo personal no había imaginado estar y el agradecido por ello era él. Nos recibió con todas las atenciones, incluso sirviéndonos él las bebidas e invitándonos a comer. Mientras sacábamos el equipo para grabar comenzó a platicarnos sobre el partido en Culiacán, lo que le había parecido la cancha y sobre aquellos aficionados que ve en cada estadio dónde juega Necaxa, preguntándose cuantos kilómetros habían viajado desde la Ciudad de México.
Comenzamos a grabar, hice la presentación -misma que tuve que repetir porque dije una estupidez- y comenzamos a platicar durante más de 3 horas con el capitán de Necaxa. Es cierto que el plan de cómo íbamos a llevar la entrevista sufrió muchas modificaciones pero me parece que Pablo disfrutó al igual que nosotros el tiempo que duró la plática. La mayor parte del tiempo fui yo quien llevó la entrevista aunque por momentos les pedí a mis compañeros que se integraran. Lo hice reír con un par de comentarios y conseguí que entre la plática nos contara algunas anécdotas de su carrera, incluso hubo un momento en el que sus ojos parecían llenarse de lágrimas, lo cual considero bueno porque de una u otra forma se abrió y se prestó a la conversación.
Pablo se portó de una forma increíble con nosotros, no nos prohibió hablar de ningun tema, siempre fue atento desde el momento en que llegamos hasta que se despidió de nosotros debajo del coche en el mismo lugar donde nos había recibido. Lo comenté en PR y lo digo acá también, parece que el jugador más entregado del equipo es también el más humilde. Si en Necaxa alguien pudiera tomar actitudes de divo es él, pero hace todo lo contrario.
El 'Jefe' Quattrocchi accedió a todo una vez que terminamos la plática: Fotos, firmas, grabar saludos e incluso llamar por teléfono a amigos que no pudieron estar ahí -básicamente porque no los invité xD-. Terminé sorprendido de la calidad humana de Pablo y salí del lugar además de satisfecho, infinitamente agradecido con él y con su familia por todas las atenciones. Por si fuera poco me llevé a casa algo que no esperaba: Un jersey de juego del equipo firmado y dedicado que me regaló y que por las condiciones en las que me lo entregó -sin habérselo pedido y en su casa- es sin duda el más valioso de mi extensa colección de jerseys rojiblancos.
No queda más que agradecerle a Pablo por la forma en que nos trató y por habernos hecho sentir con tal confianza durante el tiempo que estuvimos con él. Por si fuera poco da la impresión de que me conoce más de lo que pensé ya que al ver uno de mis textos dijo "ah, éste es buenísimo", además de que un par de veces bromeó en que por fin me habían "sacado la máscara" y que el mundo me iba a conocer. Dijo que las fotos las iban a querer más porque yo no tenía máscara que porque saliera él.
Saliendo del lugar era momento de festejar y decidimos ir a un bar a tomar un par de cervezas, de ahí fuimos a cenar y cerca de la 1 de la mañana del lunes llegamos a la Central de Autobuses para abordar el que nos traería de regreso a casa. Llegué el lunes muy temprano y por la tarde tenía en mi bandeja un correo en el que me decía que él es el agradecido y que espera que podamos reunirnos nuevamente antes de que regrese a Argentina. Simplemente puedo decir que tanto dentro como fuera de la cancha Pablo Quattrocchi es increíble. Grande Jefe!, Gracias por todo.
la neta yo no soy aficionado de Necaxa ni mucho menos sé así de fútbol, pero lo que sí recuerdo es ese campeonato que le robó el América remontando un 4-0, recuerdo con “cariño” al necaxa de Ivo Basay, Cuchillo Herrera, Pelaez, Nacho Ambriz, el Cadáver Valdez y por supuesto el ícono Alex Aguinaga, cuando el futbol era más honesto que ahora
ResponderBorrarsaludos y que chido por la entrevista
Que buena ondisima, muchas felicidades por esta entrevista y por tener a un jugador de su calidad en tu equipo, mucha suerte para el necaxa en la liguilla y enserio que buena onda conocer a jugadores asi como el, aunque no sean de el equipo de uno, muy bien.
ResponderBorrarSALUDOS!
NO MAMES que chido post :D
ResponderBorrarlas ganas que dan de estar ahi
Felicidades
Que padre ehh!!! en primer lugar tener la oportunidad de conocer a una persona que admiras, y más si esta persona resulto ser la mas buena onda y en cierto modo no te desiluciono nada!
ResponderBorrarQue buena historia ehh, para contarla a tus nietos
Besos GErardo!
@ Gerardo
ResponderBorrarEse robo del América es imposible de olvidar, aunque no era 4-0 el marcador. Y si, ese Necaxa que mencionas marcó época.
Saludos y gracias
@ Allen
Si, creo que Pablo se cuece aparte de sus compañeros tanto dentro como fuera del terreno de juego. La verdad es que no se le puede recriminar nada ni en una ni en otra faceta. Es un histórico del club y como dices incluso quienes no son del mismo lo reconocen por su entrega.
Saludos!
@ Reptilio
Hasta a mi me dan ganas de estar otra vez xD
Saludos!
@ Natali
Si, Pablo hizo todo lo contarrio a desilusionarnos, la verdad es un tipazo. Y pues si tengo nietos si se las cuento, si no a ver de los nietos de quien me aprovecho xD.
Gracias, Besos!
Que buena anécdota necaxista tienes para la descendencia Taker, felicidades y bien merecido te lo tienes por tus años de esfuerzo al equipo, si de webmasters necaxistas (o como se llame) se trata, tu también eres el ídolo o icono o como sea de la banda rayo, saludos y a ganar mañana, a ver si logramos el campeonato para que Pablo se aguante un poco más y nos regrese al ascenso con el esfuerzo de todo el plantel.
ResponderBorrar@ Arturo
ResponderBorrarAhora nomas me falta la descendencia xD. Gracias compadre, aunque creo que estoy lejos de ser ídolo o ícono. Y si, ojalá se logre el título no por la bola de huevones que están en el equipo, sino por Pablo. Lo ves hablar de la ilusión de levantar la copa y no puedes sino esperar que lo pueda hacer.
Saludos!